Mi nombre es Martina, actualmente tengo 19 años, soy una chica muy curiosa desde que tengo memoria, me gusta divertirme y meterme en asuntos turbios, me resulta muy interesante. Esta historia ocurrió hace un par de años cuando estaba pequeña aun, yo tenía apenas 13 años, desde que me desarrollé he tenido buen cuerpo, unas tetitas paraditas, un culito redondito y una panochita rosadita y apretada. Un día estaba en casa de mi prima y me metí en su cuarto a las 2 de la madrugada y conseguí a su novio cogiendo con ella, me penetraron durísimo y me gustó mucho.
Yo tengo una prima que vive cerca de mi casa, ella y yo somos muy unidas, para ese entonces ella tenía 16, era un poco mayor que yo, pero disfrutaba mucho todo hacer todo con ella. Desde que éramos pequeñas nos ha gustado hacer todas nuestras actividades juntas, cada rato que tenía libre me iba a su casa e inventábamos algo que hacer para no aburrirnos.
Así fue hasta que ella creció un poco y se consiguió un novio, un chico bastante atractivo que tenía 18 años, era bastante fuerte, guapo, con unos ojos hermosos y llamaba la atención de cualquier chica a su alance. Entonces, desde que empezaron a estar juntos yo pasaba menos tiempo con ella, siempre estaba con él o estudiando, la verdad extrañaba muchísimo disfrutar con ella todo el día, pero entendía que estaba enamorada. Yo empecé a hacer actividades nuevas en mi casa, empecé a ver series y películas para ocupar mi tiempo y no pensar en ella.
Extrañaba pasar tiempo con mi prima y su novio me estaba empezando a excitar mucho
La verdad eso me estaba costando mucho, además, estaba bastante celosa porque ella tenia novio y yo no, quería saber lo que se sentía tener a un hombre solo para mí y que me diera mucho placer. Sin embargo, con el tiempo me empecé a dar cuenta que tenia más celos de mi prima, su novia era demasiado lindo y a veces pensaba en él por las noches antes de dormirme. Yo me frotaba mi conchita mientras imaginaba muchas formas en las que me penetraba, siempre terminaba toda mojadita cada vez que pensaba en él.
A veces los espiaba cuando él iba para la casa de mi prima, ya tenía fijado los días que iba y a la hora que salía, tanto fue mi locura que me penetraron durísimo por andar espiando. En ocasiones yo me hacia la loca y salía cuando ellos estaban despidiéndose únicamente para poder interactuar con el novio de mi prima llamado Omar. El siempre me miraba con una cara de dulzura, era demasiado delicioso y lo quería solamente para mí.
Con el pasar del tiempo empecé a conversar un poquito más con Omar mientras estaba con mi prima, el bromeaba conmigo y me trataba con ternura, pero notaba que había algo más detrás de esas bromas. Tenia la certeza de que él tenía un deseo hacia mi y no iba a decirme nada porque estaba con mi prima cada vez que nos veíamos. Cada vez que conversaba con él regresaba a mi casa a destrozarme mi panochita a dedo, me frotaba fuertemente hasta llegar al orgasmo, yo desde que estaba pequeña botaba muchos fluidos.
Omar estaba empezando a fijarse en mí, quien diría que me penetraron durísimo esa madrugada
Recuerdo que un día mi prima me dijo que Omar se quedaría en su casa hasta más tarde y que no podríamos vernos, yo estaba un poco triste porque tenía ganas de hablar con su novio y poder ver ese hermoso cuerpo y observarle ese bulto enorme que trae en su pantalón. Sin embargo, yo le dije que estaba bien y que nos veríamos otro día, no me iba a quedar con las ganas, yo tenia un plan para esa situación. Por andar de curiosa me penetraron durísimo, me fascinó lo mojada que me dejó ese hombre.
Me pasé toda la noche en mi ventana asegurándome a qué hora se iría su novio, la verdad duré mucho tiempo viendo y no noté que alguien saliese de la casa. Por más que lo intenté no me pude aguantar y decidí escabullirme en la casa de mi prima para verlo, gesta es una de las ideas más alocadas que he tenido en mi vida, mi vagina me estaba controlando en ese momento. Entré a su casa, y fui yendo para los cuartos para ver donde estaban, cuando me voy acercando al cuarto de mi prima escucho unos gemidos, me prendí muchísimo y me dieron ganas de ver como cogían.
Abrí un poco la puerta para que no se dieran cuenta, Omar estaba totalmente desnudo dándole a mi primita por el culo, su pene estaba inmenso, grueso y palpitante. No podía creer lo que veía, la vagina me empezó a dar cosquillas y me mojé un poco. Ellos se dieron cuenta de que los estaba observando, Omar se acercó a mí lentamente y me empezó a manosear toda, me decía cosas muy ricas, que era una niña muy perversa y que merecía castigo, estaba muy excitado.
¡El novio de mi prima estaba loco por mi virginidad, me penetraron durísimo esa noche y me acabaron adentro!
Me quitó la ropa y me empezó a frotar su pene por mi vagina, no podía creerlo, ese hermoso hombre estaba a punto de cogerme. Mi vagina estaba un poco cerradita, pero con ese pen enorme me la abrió toda, me la dilató demasiado, me dolió un poco al principio, pero luego me fui acostumbrando y sentía puro placer. Yo gemía como toda una puta, me penetraron durísimo y yo estaba contenta, mi prima se acercó a mí y me comenzó a chupar las tetitas, ambos estaban demasiado alocados, la lujuria los consumía y cada vez Omar me azotaba con más fuerza.
Mi vagina estaba botando mucho fluido y me corrí en el pene de ese hombre, él estaba demasiado amotinado, decía que por fin era su putica y que deseaba desvirgarme desde hace tiempo. Yo comenzaba a gemir muy duro, mi prima estaba apretándome las tetitas mientras su novio le frotaba el clítoris con su mano, estábamos muy cachondos. Luego empecé a sentir un chorro caliente por mi panochita y empecé a gemir como una putita, me habían acabado adentro, mi panochita estaba chorreando semen y yo contenta.
Me penetraron durísimo esa noche, les dije a ambos que guardaría el secreto, pero quería que se repitiera cada fin de semana, así fue que empecé a disfrutar del placer con mi prima y su novio.