Mi nombre es Martina, tengo 22 años, cabello corto color rojizo, piel blanca y estudio en la universidad, los hombres me adoran. Vengo aquí para contarles acerca de la vez que fui a clase y terminé cogiendo en el baño de la universidad, uno de los momentos mas locos y excitantes de mi vida. Tengo un cuerpo bastante voluminoso y excitante según los hombres, cada vez que camino por los pasillos de la universidad todas las miradas se dirigen hacia mí.
En la universidad en donde estudio están muchos hombres hermosos y guapos, sin embargo, no tengo novio ni nada por el estilo. Pero, en ocasiones me gusta divertirme con algunos de mis amigos, me fascina salir con hombres y que me cojan duro hasta que me quede la vagina irritada y llena de placer. Aquel día fui al salón de clase muy hermosa, me puse una ropa muy sexy, me maquille como una diva y me pinte los labios y yo me veía irresistible.
Ya estábamos finalizando el semestre y los profesores no estaban dando mucha clase, de hecho, ese día teníamos clase con 2 profesores únicamente. Todos mis compañeros y yo estábamos muy emocionados porque estábamos a punto de tener vacaciones y podríamos salir de fiestas y emborracharnos a cada rato. en fin, llegué al salón de clase y estaban todos mis compañeros y el profesor empezaba a dar su clase, estaba muy emocionada porque este era el último día de clases y no tendría que ver más a los profesores.
Estaba en clase con ansias de llevar pene
La clase duro como 30 minutos aproximadamente, luego el profesor se fue del salón y empezamos a hacer desastre con mis compañeros mientras llegaba el siguiente y ultimo profesor. Yo estaba conversando con Anderson que es un gran amigo mío que esta riquísimo y ya hemos tenido encuentros sexuales anteriormente, yo estaba desatada y quería que me cogieran duro. Nunca había pensado que algún día terminaría cogiendo en el baño de la universidad, pero no me importa porque la pasé muy rico y gocé como una zorra.
Anderson me estaba comentando que teníamos mucho tiempo sin vernos y sin conversar como lo hacíamos antes, ese quería coger conmigo y yo estaba dispuesta. También me propuso que podíamos ir para su casa a escuchar musiquita y pasar un rato bien para celebrar que no tendremos más clases. Yo le dije que estaba encantada y que me fascinaba la idea de ir a su casa para “pasar un rato bien”, le dejé en claro que extrañaba las veces cuando teníamos sexo y que quería que repitiéramos eso.
Ambos nos quedamos viendo con una cara de perversión total y nos pusimos a recordar los momentos ricos que pasábamos en su casa cada vez que terminábamos cogiendo. Luego llegó el siguiente profesor a impartir su materia, estaba bastante ansiosa por qué Anderson me cogiera durísimo, pero al mismo tiempo estaba aliviada porque era la última clase que íbamos a ver. El profesor estaba hablando de unas cosas que nadie entendía y nadie le estaba prestando atención, ya que, era la última clase que íbamos a tener y todos estábamos ansiosos por salir de allí.
Ya faltaba poco para salir del salón, que rico fue estar cogiendo en el baño de la universidad
En la clase de ese profesor duramos 1 hora y el tiempo se hizo eterno, todos sentíamos que esa clase nunca iba a terminar. Y yo con ganas de que me metieran el pipe a ver si la clase se volvía interesante, ya tenía planeado las cosas que iba a hacer con Anderson. Luego el profesor salió del salón y todos nos pusimos muy emocionados y alocados, estábamos pensando en todas las locuras que íbamos a hacer en unas horas. Yo no podía aguantar las genas que tenía y terminé cogiendo en el baño de la universidad.
Anderson y yo nos miramos fijamente con una cara de deseo sexual, estábamos convencidos de que teníamos que coger lo más pronto posible. Anderson se acercó hacia mí y yo lo comencé a besar muy sensualmente, andábamos hasta el borde de la excitación, yo necesitaba que ese carnoso hombre me metiera el pene duro por mi vagina hasta que me sangrara.
- Ayy Anderson quiero que me cojas durísimo y que me destroces la vagina, no aguanto para llegar a tu casa. Vamos para el baño a coger que ando falta de tu pene.
- Uuff que rico mi amor, yo tampoco me aguanto para cogerte durísimo, vamos para el baño para que pruebes toda mi leche.
Ambos nos fuimos corriendo para el baño que quedaba al otro lado del pasillo, andábamos muy cachondos y no quería esperar otro segundo para cogérmelo. Entramos para el baño, cerramos con seguro y empezamos a manosearnos, ya por fin estaba sintiendo el pene de mi papi rico, estaba desesperada porque me penetrara. Él se empezó a bajar el pantalón, tenia el pene parado y grueso, lo agarré con mis manos y empecé a masturbarlo, era la puta más feliz del mundo cogiendo en el baño de la universidad.
Terminé cogiendo en el baño de la universidad con mi compañero de clase
Yo me quité la ropa y Anderson comenzó a acariciarme las tetas mientras le acariciaba el pene, el placer que sentíamos era una locura, había mucha lujuria sexual. No teníamos mucho tiempo para coger, puesto que, podían abrir la puerta y nos delataríamos, después me saqué su pene de la boca y lo acerqué a mi chocha. Empecé a frotarme ese pene en mi vagina y luego me lo metí completito para empezar a sentir lo que era bueno, su pene era venoso y grande, rompía mi vagina con cada embestida.
Anderson me cargó y me tenía levantada contra la pared, y me empezaba a bombear durísimo azotando mientras me insultaba, me sentía como una puta de Brazzers. Me empezaba a doler mucho y estaba gimiendo como si fuera una perra barata, mi papi estaba disfrutando mientras me rompía. Cada vez me bombeaba mas duro y gemíamos con mas intensidad, yo adoraba todo lo que ese hombre me estaba haciendo y estaba goteando sudor y flujo vaginal.
La vagina la tenía palpitando y ya deseaba que me echaran semen en todo el cuerpo, Anderson siempre ha sido una bestia sexual y le encanta azotarme duro y dejarme el culo rojo.
- Ugghh aahhg que rico papi, sigue dándome duro hasta que se te acabe el semen, no quiero que nos separemos nunca de este momento. Llevaba mucho tiempo deseando que me volvieran a coger tan duro que no pueda ni caminar al día siguiente.
- Yo se que te encanta que te meten el pene duro pequeña puta, me fascina dejarte el culo rojo de tantas nalgadas que te meto, Me enloquezco cuando te pones zorra conmigo.
Estaba necesitada y quería que me metieran la verga por mi culo
Me estaban cogiendo duro, nunca me imaginé que por tanta necesidad de pene iba a terminar cogiendo en el baño de la universidad. Él me estaba acariciando las tetas mientras me cogía, era todo un sádico y le encantaba morderme los pezones, eso me dolía, pero me hacía gritar de placer y a Anderson le fascinaba. Yo estaba consciente de que en cualquier momento alguien podía tocar la puerta y levantar sospechas, pero no me preocupa porque ya todos se habían ido a sus casas.
Seguimos cogiendo como unos perros salvajes y Anderson tenia la pinga parada, cada vez crecía más, yo estaba adolorida y encantada a la vez. Luego mi papi me puso en cuatro patas y me empezó a mamar el culo, fue la mejor mamada de culo que me han hecho en mi vida. fue una mamada de culo de 20 minutos y yo sentía que nunca se iba a terminar, luego siento que mi culo palpita y está todo abierto y dilatado.
Me metieron el pene duro por el culo, fue una experiencia bastante divina porque mi culo estaba abierto y solo sentía placer. El pipe de Anderson estaba palpitante, y se sentía muy caliente en mi culo, mientras tanto yo me estaba metiendo mis dedos en la vagina. Estaba recibiendo placer por mis dos orificios y mi papi estaba manoseándome las tetas, yo estaba gritando durísimo de placer y Anderson también, no me importaba un carajo si escuchaban afuera.
Y así fue como termine cogiendo en el baño de mi universidad
Me estaban metiendo pene duro por el culo, estaba dándome pipe trancado y sentía que me iban a romper el esfínter, me estaba empezando a doler y quería que me echara toda su leche. Ya estábamos a punto de acabar, duramos en la misma posición durante 40 minutos y mi culo estaba full de leche, me acabó en mi culo mientras estábamos cogiendo en el baño de la universidad. Luego nos vestimos y nos fuimos rápidamente del baño por si alguien llegaba.
Fue el momento más rico del mundo junto a mi compañero de clase, luego nos fuimos a su casa durante todo una semana y las locuras subieron de nivel.